MILAGROS EN EL FATIN

El Cortezas estaba entregado,como un torero de primera,lanzaba cañas y patatas con magra a diestro y siniestro,al tiempo que con la toca,que hábilmente se sujetaba de la trabilla del pantalón limpiaba 20 cmtrs de barra.-¡Que yo he pedio calamares¡-Antonio le contestaba con un –OLE-y no le volvia a mirar hasta que el plato de las patatas estaba vacio.Alfonso Nuñez se aplastaba contra la maquina del tabaco con la mano de la cerveza levantada a modo de extraña estatua de la libertad,para evitar que en el trasiego de clientes le derramaran el preciado jugo,las bandas de las hermandades vestian inmaculadas,con sus trajes de gala y sus tambores y un coro de mujeres pias soltaban el rosario para pinchar de las frita´s chorreosas de aceite.-Seis cañas y dos platos de papas-
En los servicios,la banda municipal trataba de adaptar Paquito el Chocolatero para que sonara como un Ave Maria,pero alegre, y a mi, el Oscar ya me habia metido dos veces el codo en el ojo .-A la mierda-dije saliendo de aquel insoportable ajetreo a la calle ,donde los zagales de la escuela hogar formaban en dos filas .En aquel mismo momento aparecian por la calle de la plaza ,las monjas,curas y catequtistas entonando un –ADEUS RETORUM-Toda la clientela del Cortezas dejo las cervezas a medias para unirse a la procesion ,que encabezada por una anciana en silla de ruedas se dirigia al antiguo supermercado del Marmulla.La anciana llegado a un punto trato de hacer retranca,pero un acertado empujon de los municipales la coloco en un lugar determinado,alli donde según todos se realizaba el milagro.Hubo unos segundos de silencio antes de que la vieja comenzara su vision,primero los cuatro pelillos de la cabeza que le quedaban se alzaron milagrosamente hacia el cielo y entonces empezo a convulsionarse y gritar-¡LA VIRGEN,LA VIRGEN,LA VIRGEN¡-Todos los presentes se arrodillaron y Paquito el Chocolatero se mezclo con el timbal del Flores y con el
Rosario de las beatas.-MILAGRO,MILAGRO,COMPREN EL NUMERO DEL MILAGRO-Gritaba un vendedor de cupones mientras la vieja empezaba a echar humo por las orejas.
Creo que yo fui el unico ,que vi en aquel lugar milagroso, la cajita aquella echando chispas .No dije nada,porque yo si creo que el pueblo tiene que seguir soñando con milagros