domingo, 30 de mayo de 2010

HACE 11 AÑOS YA




SE ME HA HECHADO EL TIEMPO ENCIMA Y YA


VOY TARDE,PERO BUENO.


Hace once años pasabamos por el camino real


con el coche de la campaña electoral del PIE


invitando a la gente a que asistiera al


mitin marinero de Gines Romero,cuando vi


en el parque del Meson a aquella pareja de


recien casados hechandose fotos,pedi a Joaquin


que parara para darles la enohorabuena.


Hoy desde aqui ,once años despues lo quiero


hacer otra vez.FELIZ 11 ANIVERSARIO


a OSCAR Y SEÑORA,seguis los dos guapisimos

2 comentarios:

Anónimo dijo...

grandes personas, pero ayer te tragastes el gol jajjaajjajaja,un abrazo

Anónimo dijo...

¿Os habéis fijado en que Oscar no te pide favores, sino que te dice que los necesita?

Algo tiene este Oscar, mi amigo de la infancia, que no tienen el resto de "los" amigos.

Y cuando digo amigo de la infancia me refiero a él y esos otros amigos que todavía conservo, aunque nunca os llame, o rara vez os vea. Me refiero a esa clase de amigo que sabes que si te encontraras ahora mismo te alegrarías enormemente y sentirías como si lo llevases viendo todos los días.
Puede que sea porque esta gente te ha visto llorar por hacerte una herida en la rodilla al caerte de la bici (seguramente por su culpa), porque te ayudaba a esconder o mentir a tus padres cosas que no querías que supieran, porque eran esos tíos que te aguantaban cuando eras un completo imbécil (porque mira que se es tonto de niño) o porque te has enfadado y desenfadado con él tantas veces que te resulta difícil volverte a enfadar (hasta que estas 10 minutos seguidos con él).

A veces creo que es porque ellos piensan en tí cuando eres un chaval y tú también lo echas de menos.

Pero realmente pienso que es porque cuando eres chaval no eliges los amigos, los tienes por puro azar, porque son hijos de los amigos de tus padres, porque tu primer apellido empieza por la misma letra y te pasas 13 años con él de compañero de pupitre, porque te toca un vecino con tu misma edad, porque tu hermano mayor va con su hermano mayor a clase… y todas las coincidencias que queráis. Y conforme te vas dando cuenta de que la vida no es el camino de baldosas amarillas con árboles de algodón de azúcar y ríos de batido de chocolate que aparece en los cuentos, aprendes a apreciar los golpes de suerte que te presta la vida.

A medida que creces, vas a la universidad y allí "eliges" a la gente con la que quieres estar y comienzas a compartir otra parte de tu vida muy importante y creas otros lazos con otra gente. Pero, la gente que me alegra el día, es gente como mi amigo Oscar.