UN AMIGO EN MARRUECOS

Silvestre, cuelga esto donde mejor te parezca.
A menudo se habla del racismo de los europeos hacia los marroquíes, que es ciertamente un fenómeno lamentable. Pero no se habla nunca, quizá porque no es políticamente correcto, del racismo marroquí contra los extranjeros -por desgracia, me parece a mí, mucho más extendido que el otro (de hecho, practicado por toda la población marroquí en Marruecos, salvo honrosas excepciones). Llevo casi dos años viviendo en Marruecos por motivos de trabajo (y también porque amo el país). Vivo cerca de la plaza Djemaa el Fna, que me veo obligado a cruzar de regreso a mi casa, tras el trabajo, cada día. Y cada día sin excepción he de soltar dinero a todo Dios por el mero hecho de ser extranjero y pasar por allí, o arriesgarme a recibir insultos e imprecaciones si un día por desgracia no llevo suelto encima; cosa que no veo que suceda a los innumerables marroquíes -algunos de ellos muy, muy ricos, no como yo que trabajo en una oficina - que pasean por el lugar.
El otro día estaba yo en compañía de un conocido marroquí, por cierto hijo de una persona de cierta relevancia en la ciudad y elevada posición social, y naturalmente uno se acercó y me pidió dinero a MÍ directamente, sin ni siquiera echar una mirada a mi acompañante. Cuando le pregunté por qué no le pedía dinero a mi acompañante POR UNA VEZ (es una persona que me pide todos los días) me respondió, con total naturalidad: 'No, a él no. Él es marroquí y está en su país'.
No quiero ni imaginarme qué es lo que me pasaría si un día, en España, se me ocurriese acercarme a un marroquí en un parque y exigirle que me diese dinero ya que no está en su país. Se me llamaría de RACISTA para arriba, y aún podría ser denunciado a las autoridades (cosa que veo muy bien). Sin embargo, aquí en Marruecos es la norma y ni siquiera es percibido como racismo; que el taxista intente cobrarte el triple, que el casero te pida mucho más de lo que pediría a un marroquí, etc. etc. etc. es lo normal, hasta el punto de que cuando uno se encuentra con un marroquí que te trata como si fueras del país a uno le dan ganas de llorar de la emoción y no puede sino recelar de algún tipo de artimaña -artimaña que para más inri generalmente se produce, finalmente.
Mis amigos marroquíes en España pueden testificar que yo JAMÁS me he rendido al estereotipo que te dice que el marroquí es sucio, ladrón, etc. y que ciertos subnormales en mi país se empeñan en divulgar. Por desgracia, no puedo sino concluir, tras dos años de estancia en este país, que para la práctica totalidad de los marroquíes yo soy RICO, GILIPOLLAS, Y PERVERTIDO SEXUAL, sólo por el hecho de ser extranjero. (Las mujeres extranjeras, prostitutas).
El otro día invité a cenar a mis compañeros y compañeras del trabajo en mi casa. Al día siguiente tenía a mi casero pidiéndome explicaciones porque los vecinos le habían dicho que yo estaba llevando prostitutas y homosexuales a mi casa.
Ésa es la triste realidad del país. ¿Eres extranjero e invitas a un compañero de trabajo a tomar algo a tu casa? No puede ser que sea un compañero de trabajo, sin duda es un prostituto homosexual. ¿Eres extranjero y te vas de vacaciones 15 días? No, no puede ser, sin duda estás en la cárcel por alguna razón particularmente horrible.
Y así todo.
Naturalmente tuve que demostrar (!!) que los que habían estado en mi casa eran colegas del trabajo. Y, una vez demostrado, nadie vino ni a disculparse ni a pedirme perdón.
Y hasta la próxima. Porque habrá próxima, seguro.
Quiénes, como yo, amamos Marruecos y hemos disfrutado de la exquisita hospitalidad en el medio rural marroquí, no podemos sino sentirnos profundamente decepcionados de esta actitud cada vez más común, sobre todo en las ciudades.